Para bien o para mal, por distintas circunstancias, en esta vida me ha tocado algún que otro peregrinar. Ello ha conllevado el tener que despedir, recibir, conocer gente... algunas de estas personas me han concedido el privilegio de considerarse mis amigos... y muchos, aún hoy, siguen siéndolo.
Gracias por estar ahí.

sábado, 9 de julio de 2011

La boda.

Una boda similar me ha hecho recordar.
 Fue el 2 de julio de 2005 (¡Jordi!!!!!  ¡Se nos ha vuelto a pasar el Aniversario!!!! ¡Tú, cocinando paella para treinta...y yo desparramando el gazpacho por la cocina de quien tiene más paciencia...¿Cómo nos íbamos a acordar??!).

Cuando nos vinimos a vivir juntos -de alquiler- dijimos: "A ver si nos casamos... " "Sí...ya sacaremos el rato".

Cuando comenzamos a construir nuestra casa y nos hipotecamos: "A ver si nos casamos... " "Sí...ya sacaremos el rato".

Cuando nos embarazamos:  "A ver si nos casamos... " "Sí...ya sacaremos el rato".

Cuando nació Julia: "A ver si nos casamos... " "Sí...ya sacaremos el rato".

Finalmente fue un tema de legalizarnos ante situaciones que pueden resultar muy adversas. Y no querer casarte- era yo bastante cabezota- priva, en esos casos, de derechos fundamentales a tu pareja.

Así que, a nuestra manera, lastrando la pérdida de quien, con Sonia, seguro hubiese venido -aún sin ser invitados- porque era más que un amigo, otro hermano:
Sin religiones,
con la cara lavada,
en donde vivimos,
oficiado por un concejal del ayuntamiento -que ha terminado por ser vecino nuestro-,
con nuestra familia más próxima -padres y hermanos (que en aquel momento Óscar y David no tenían ni pareja que los acompañasen; yo ya hace años que no tengo abuelas ni abuelos y a los de Jordi no les íbamos  hacer venir desde tan lejos para tan fugaz enlace),
comiendo casi donde queremos -porque en donde queríamos no nos cogieron el teléfono el día anterior para reservar- y a la carta cada cual, claro.
Sin incordiar a los amigos...
Precisamente como ninguno estuvisteis ya era hora de poner alguna foto ¿No?

 El cava fue sorpresa y cortesía del Ayuntamiento. Muchas gracias.

 Julia tenía nueve meses, con el trajín, aquel día se mantuvo a pan y teta. Menú especial.

Los acompañantes, según se lee:
Óscar (Mi cuñado), Maite y Francisco (Papás de Jordi), Julia (Nuestra primera peque), yo misma y Jordi, Paloma (Mi mamá), David (My brother) y Ángel (Mi papá)... Chin Pon.
José Antonio de fotógrafo, no he encontrado esa foto que hiciste, tan arriesgadamente, subido al muro de la entrada. Quizás fue con la cámara de Francisco.