Para bien o para mal, por distintas circunstancias, en esta vida me ha tocado algún que otro peregrinar. Ello ha conllevado el tener que despedir, recibir, conocer gente... algunas de estas personas me han concedido el privilegio de considerarse mis amigos... y muchos, aún hoy, siguen siéndolo.
Gracias por estar ahí.

domingo, 31 de enero de 2010

Mi personal apología de la teta.

Llegó la hora de intentar divulgar algunas de mis más arraigadas convicciones: La defensa de la lactancia materna prolongada, el colecho y la crianza con respeto. Casi todos sabéis ya "de que pie cojeo", pero para quien no lo sepa y sobre todo por si esta información le pudiera resultar útil a alguien, tanto a quien me conozca como a quien no.

De ninguna manera se debe entender lo aquí escrito como información científica ( que ya hay mucha en los libros), ni como consejos a seguir por nadie, solamente es mi experiencia personal y emocional relacionada con este tema que me parece tan extremadamente beneficioso tanto para las madres, como para los bebés, así como a la sociedad en general, y que he visto y he vivido en mis propias carnes como esta misma sociedad, no sólo siente intolerancia, sino un rechazo claro hacia una cuestión que no puede resultar más lógica, simplemente porque no puede ser más natural.

No hace mucho (este verano), una amiga que vive lejos (por los kilómetros digo) y que pasó unos días (siempre se me hacen pocos...) en nuestra casa con su familia (su marido y su bebé, que en febrero hará los dos años y que os quedaréis con las ganas de saber quienes son... no sea que ellos prefieran mantener su intimidad... Afritos para los tres) me contaba que antes de venir, habían pasado unos días en casa de unos familiares y que una noche, que el bebé no podía dormir, lo metió en su cama, se sacó la teta y mamando cayeron ambos plácidamente rendidos... y me confesaba que "no recordaba despertar más dulce en su vida", al amanecer primero el pequeño y descubrir el pecho, que quedó descubierto , de su madre, que todavía seguía dormida, para poder con total libertad prenderse de él hasta que ella despertara y se regalaran sus primeras sonrisas de la mañana. Mi niño... ese sí que es el "desayuno más dulce", ojalá lo pudiera recordar él, como lo recordará siempre su madre y como recordaré yo su emotivo relato.

Una de las cosas que al escucharla pensé, era en mi propia fortuna, por ser capaz de haber disfrutado esa sensación tantas mañanas y estar convencida de , que en lo que de mí misma dependa, lo quiero seguir viviendo,con el bebé que ahora amamanto y que todos sabéis ya quien es: Luisa Petisa, "María" para su hermana.

Y esta misma amiga (que tuvo un difícil inicio en su lactancia, descaradamente por un mal asesoramiento de su entorno más cercano, en especial de los sanitarios que les atendieron a ella y a su bebé (aunque en este tema a mí ya no me sorprende nada) y les prescribieron cosas raras, como esa de que tome el pecho, si, pero cada tres horas y diez minutos de cada lado... y, precisamente por eso, le reconozco todo un mérito y le pongo una etiqueta de gran luchadora), este mismo verano también me "echó en cara" (en el buen sentido, de verdad) el que yo no le hubiera dado "más caña" en sus comienzos y yo realmente me llegué a arrepentir de no haberlo hecho. Pero es que una muchas veces no sabe como hacerlo, no sabe quien realmente es el necesitado de la información y ayuda y me he encontrado algunas veces sembrando en terreno infértil, que por otro lado , de verdad, que no me importa... que sembrar siempre tendrá una utilidad, digo yo. Por lo menos el compartir y discutir ideas.

Y sé que los inicios simpre son liosos, sobre todo los de la maternidad y la lactancia y no quise ser "mosca cojonera" por si acaso... pero ahora sé que debí de haberlo sido... si total la "confianza da asco" :DDDDDDDD

Y por esto, y otros muchos motivos más, seguiré con mi personal apología de la teta.
¡Qué acabo de empezar!!!! Pero... que a gusto me estoy quedando...
Pero será mejor por capítulos, que no quiero marear.

Y si a la auténtica protagonista de esta entrada no le importa "dar la cara", me lo haga saber, que para mí, desde luego, es toda una honra tenerla como amiga y como defensora de mis mismas convicciones.

8 comentarios:

  1. Sabes??? Me hace gracia, porque las siestas mas largas tanto mias como de mi enana son en esa postura, las dos tumbadas una al lado de la otra y con la teta a su entera disposicion, y la gracia que me hace despertarme porque de repente le ha entrado hambre y sin contar conmigo se ha enganchado hasta quedarse otra vez dormida, creo que es lo mas espectacular del mundo y nadie deberia perderselo, aunque como todo es una opcion. Yo por suerte lo he disfrutado dos vces, una con Dani y ahora mucho mas relajada con Monica( ya no me da miedo espachurrarla).
    Y que lastima que haya gente que no sea capaz de entender esto de una manera natural y se ofenda cuando te ven dando el pecho en un lugar publico y eso que al menos yo hago malabares para ser lo mas discreta posible

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  2. Si, con el segundo se disfruta de todo con más calma... aunque siempre haya más trabajo en casa... y no podamos desatender al mayor, pero la capacidad de amar ( ... y la paciencia) está claro que con cada hijo se multiplican :D, ay sino...

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  3. Gracias Ale! Es genial leerte. Me sirve para saber que no estoy loca. Cuando comento que quiero probar el colecho la gente pone unas caras... como si estuviese diciendo barbaridades. Es lo que me pide el cuerpo y creo que sólo por eso merece la pena probar, no? Cuando leo las sensaciones maravillosas de esos momentos...ufff! Estoy deseando tener a la pequeña Adriana conmigo!

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  4. Sé que tú reúnes todas las condiones necesarias para disfrutarlo, no escuches a nadie, nada más a tí misma y a tu "beba"...sácate el reloj , buscad vuestro lugar e ignora las prisas. Y sobre todo intenta estar bien informada de antemano, que no te pille en "un renuncio" el aluvión de opiniones que, seguro, va caer sobre todo lo que hagáis.
    Pero no te preocupes que por eso hemos pasado todas :DDDDD
    Mil besos. Nos vemos pronto ;)

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  5. Hola Ale, aunque hace ya mucho tiempo que leí este relato, no he podido contestarte antes porque, como bien sabes, me cuesta sentarme al ordenador.... La verdad es que me ha gustado mucho recordar todo eso, es muy importante para mí, pero quiero que sepas que no quiero que te sientas mal porque en su momento no insististe conmigo en la lactancia, sienmpre has sido una gran ayuda para mí, incluso en la distancia que nos separa, siempre has tenido palabras de aliento, cariño y sabios y honestos consejos; siempre has estado a la altura de las circunstancias y nunca me has fallado, incluido en el tema de la lactancia, no te sientas mal puesto que has sido y sigues siendo una guia y referente para mi.Muchos afritos

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  6. No estoy segura de que se pueda ser guía de quien a mí me guía, ni referente de mi propia referencia... quizás esto explica un ciclo vital como tantos otros... cuanto bien me hace tener a mi alrededor personas como tú.

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  7. "No estoy segura de que se pueda ser guía de quien a mí me guía, ni referente de mi propia referencia". Qué grande es la amistad... aquí no hay quién es más listo ni más sabio ni nada, porque los verdaderos amigos se guían unos a otros en distintos momentos y por distintas sendas.

    Cómo no, me encanta tu apología personal de la teta (y lo que naturalmente debería llevar aparejado :)). Recuerdo haber hablado de esto el último martes... o de aspectos de ello. De cómo a menudo nos sentimos cohibidas a la hora de hacer esta apología, a veces por miedo a ofender, otras a ser menospreciadas (en ocasiones, ridiculizadas)... a mí también me hubiera venido bien una amiga que 'me diera la lata', y se 'empeñara' en ayudarme. Gracias a Dios, si hay una siguiente vez, ya no estaré tan sola :))))))))

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  8. Personalmente me ocuparé de darte toda la brasa que se me ocurra... Je je. ¡Prepárate! Que como yo, ahora somos unas cuantas XDDDDDD

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